LA HUELGA Y LOS PIQUETES

 Cada vez que hay huelga general pasa lo mismo, que se vulneran todas las libertades habidas y por haber. Los sindicatos habían convocado para hoy una huelga general contra la Reforma que propugna el PP y básicamente es sabido que ir a la huelga es un derecho constitucional de todos y cada uno de los españoles, es decir, que hay que respetar el derecho de una persona a hacer huelga. Pero mi pregunta es ¿qué pasa con el derecho opuesto y no menos real, el de no ir a la huelga? Ese parece que no existe. Ni lo contemplan los sindicatos ni lo respetan los palurdos de los piquetes.

Dicen los susodichos sindicatos convocantes que ha secundado la huelga de hoy un 77% de la población y ¿quién soy yo para dudarlo? Un 77 % del cuál un 10 % serán sindicalistas, huelguistas convencidos, y el otro 67 % será masa obligada a cerrar sus negocios, a no asistir a su trabajo por miedo, coacción, amenazas y represiones varias. Me paso por lo tanto por el forro las cifras de los sindicatos. Si hay coacción de cualquier tipo no se puede valorar con objetividad el seguimiento de nada.

Nombraré algunas de las funciones que los piquetes han desarrollado hoy por todo el ancho y largo de Ex-paña a saber para mantener y preservar SU derecho a la huelga;

-          Han amenazado a viandantes que entraban en comercios (como tú mismo, tu madre, tus hermanos), llegando incluso a agredirlos con violencia por entrar a comprar.

-          Han roto escaparates y quemado contenedores (todo el mundo sabe que los cristales y el plástico son materiales altamente anti-huelguistas).

-          Han manipulado las cerraduras de comercios para que no pudieran abrirse (vaya esto sí es libertad).

-          Han agredido a policías a pedradas cobardemente ocultos tras sus máscaras (está claro que a tanta libertad hay que ocultarle el rostro).

-          Han asaltado en masa y robado más de 2.000€ en efectivo en un casino de Barcelona mientras pretendían parar su actividad laboral (a nadie le amarga un dulce, ya que tiene que cerrar le ayudan a limpiar primero).

-          Y por demás, han insultado, faltado al respeto de personas humildes que tienen que abrir sus negocios no porque comulguen con ninguna ideología ni siquiera con la misma reforma sino para poder llegar a fin de mes, han vulnerado todos los derechos democráticos para pedir el respeto del propio y por eso he de expresar mi público desprecio ante esta banda de energúmenos que ante la falta de luces, ideas para mejorar y a veces hasta de ganas de vivir, tiene que salir a la calle a avasallar, romper, robar y ofender. Eso es el verdadero piquete, un tumulto de garrulos molesto y peligroso que hace de la ignorancia y de la rabia común su estandarte.

Espero y deseo que la próxima vez que haya huelga general, si tiene que haberla, los ex-pañoles sigamos sabiendo respetar el derecho a  la misma como hasta ahora pero ellos aprendan a respetar también la dignidad de aquel que no quiera o no pueda secundarla. Por cierto, ¿si sólo rompen, destrozan, agreden y roban por qué se les llama piquetes informativos? Ah, ya, debe de ser porque te informan de que te van a partir la cara segundos antes de partírtela. ¡Bendita huelga!