miércoles, 22 de diciembre de 2010

CASI NOS TOCA "LA GORDA"

Hoy es un día grande por dos motivos. El primero es la Lotería de Navidad que ha repartido su suerte y su dinero por toda España en una muestra de solidaridad generosa y casi celestial. El otro es el rechazo del Congreso a la llamada Ley Sinde que, bajo el pretexto de impedir el tránsito de archivos con derechos de autor por la web, vulneraba claramente los más básicos principios de la evolución y el desarrollo. Estos atontaos del partido de las tres mentiras (PSOE) no se enteran de la misa la mitad. Y es que no se puede detener el desarrollo tecnológico ni se le puede dar al pueblo una herramienta y luego decirle que no la use. Si el actual sistema y la red permiten las descargas y permiten el intercambio de archivos entre usuarios sin ánimo de lucro, está claro que la solución no es ni será jamás armarse para poder cerrar páginas webs a tu antojo, lo maquilles como lo maquilles. Sí es cierto que necesitamos como mucho un modelo nuevo de canon para que los creadores y los artistas puedan honradamente vivir de su trabajo, de su creación y también es cierto que deben desaparecer los intermediarios entre el artista y el pueblo en la medida de lo posible. Por eso tengo claro que internet democratiza, sin duda alguna, el panorama artístico. Lejos de matar la cultura internet hace llegar a todos los rincones del mundo al arte en sus diversas formas y es esto último, quizás lo más importante para la existencia del arte en sí, lo que la señora ministra de cultura no ha comprendido o no quiere comprender, presionada como estará por las grandes empresas discográficas y por sus pobres amigos cantantes que no llegan a fin de mes (Alejandro Sanz, Miguel Bosé, etc). Es curioso, dicho sea de paso, que los que apoyan esta Ley son precisamente los que tienen millones de euros para tapar España entera. ¿Es eso acaso una Ley popular, del pueblo obrero español como reza su eslogan? Por eso digo que son el partido de las tres mentiras porque ni son Socialistas (que a la vista queda con las políticas elitistas y caóticas que hacen), ni son obreros (porque gente como Zapatero no tiene cotizado ni un día de su vida, ni falta que les hace porque cobrarán hasta que se mueran como verdaderos nobles), ni son españoles (bien sabido es que son el partido de la separación entre comunidades y del destrozo en el sentimiento nacional). Entiendo, como decía, que “artistas” como Alejandro Sanz estén molestos porque las descargas entre jóvenes hacen menguar su riqueza o mejor dicho no la hacen crecer como ellos querrían y quizás tengan que conformarse con las tres mansiones de Miami y no puedan comprar una cuarta en Honolulú (que lo dudo). A mí también me jodería eso pero ahora ya tengo bastante con tratar de sacar una hipoteca para comprar un pisito. Entiendo también que las grandes y obsoletas casas discográficas estén indignadas porque sus cds a 20 € ya no se venden tanto pero quizás habría que plantearse que el problema no es del pueblo que comparte archivos a través de internet sino del modelo de negocio que siguen estas empresas “prehistóricas” y de las intenciones de perpetuidad de algunos cantantes ambiciosos y nada solidarios. Ellos ya ganan mucho más dinero en un solo concierto del que un ciudadano medio español ganará trabajando 3 años de su vida (eso si tiene la suerte de tener trabajo). Pero ¿qué hace el Gobierno y en especial el Ministerio de “Incultura”?, ¿insta a estos colectivos a adaptarse a los nuevos tiempos de manera competitiva y lógica?, ¿explica a los adinerados triunfadores de la copla que nadie duda de la autoría de sus canciones y que sean un poco más conscientes y solidarios?. NO. Criminaliza al pueblo que lo ha votado (y que será tonto si sigue votándolo en el futuro), lo compara en campañas publicitarias con ladrones de coches, maltratadores, y diversos delincuentes para infundir en el ánimo popular la idea de que descargar una canción o una película es un acto delictivo y que por ende, somos delincuentes, mafiosillos, la lacra de la sociedad. Perdone usted, somos la sociedad a secas, porque más del 80 % de los internautas descargan archivos y comparten archivos que tienen en sus ordenadores. Y, dicho sea también de paso, no sólo no nos sale gratis, sino que pagamos luz, factura telefónica y de ADSL, equipo informático con canon incluido, cds vírgenes que también tienen su canon y cualquier otro mecanismo de memoria USB que lleva asignado un porcentaje en el precio destinado al canon. Entonces queda claro; el problema no es del pueblo. Pagamos más que con creces las descargas que hacemos. Inventen los politicuchos un sistema de canon más ajustado si se quiere, eliminen intermediarios y actualicen las empresas que quedaron anticuadas. Ah y díganle a Alejandro Sanz que me regale una de sus casas en Miami…total él tiene muchas más.